Enelcamarin.cl
·15. März 2025
Congreso Nacional despacha proyecto de actividad física en escuelas: Se implementará al inicio de la jornada y en recreos

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·15. März 2025
La iniciativa establece que los estudiantes, desde la educación parvularia hasta la enseñanza media, participen en actividades físicas diarias, diferenciadas de las clases de educación física, Estas deberán ser de al menos, media hora de duración al inicio de la jornada escolar, con cinco minutos adicionales al comenzar cada asignatura.
La Comisión de Salud del congreso nacional, despachó el proyecto que busca promover la actividad física y el deporte en los establecimientos educacionales, luego de varias jornadas de debate, respecto al tema.
Los miembros de la comisión aprobaron las diez indicaciones presentadas por el Poder Ejecutivo, con ciertas modificaciones al texto original.
La iniciativa, que se encuentra en su primer trámite legislativo, es una moción presentada por los senadores Francisco Chahuán y Pedro Araya, junto al actual diputado Carlos Bianchi y los exparlamentarios Rabindranath Quinteros y Guido Girardi.
El objetivo principal del proyecto es garantizar que los estudiantes, desde la educación parvularia hasta la enseñanza media, realicen actividades deportivas, dentro de la jornada escolar, al menos una vez, durante el día, como andar en bicicletas o usar mancuernas.
Estas actividades no podrán sustituir la clase regular de educación física y deberán ser de alta o baja intensidad, de carácter formativo, lúdico, integrador y sin ningún tipo de discriminación.
El proyecto estipula que, al inicio de cada jornada escolar, las instituciones promoverán 30 minutos de actividad física, y al comienzo de cada asignatura, los profesores deberán fomentar cinco minutos de ejercicio de baja intensidad.
Además, durante los recreos o pausas estudiantiles, se impulsará la práctica de deportes y juegos, ya sean competitivos o no, utilizando los recursos e implementos deportivos disponibles en cada establecimiento.
La presente iniciativa, tiene como principal objetivo, reducir los alarmantes índices de obesidad, Según un estudio liderado por instituciones académicas de Estados Unidos, Irlanda, Australia y Francia, que registró el peso y estatura de más de 220 millones de personas de 190 países, publicado por la revista médica The Lancet, más de 1.000 millones de personas fueron clasificadas como obesas en 2022, y descubrieron que las tasas de obesidad se han cuadruplicado entre los niños y adolescentes.
A nivel latinoamericano, la prevalencia de la obesidad en niñas, sobrepasó el 20 por ciento y a nivel global, alcanzó un 30 por ciento, la más alta en toda la región.
Cifras que se condicen, con los datos a nivel nacional, realizados por el Mapa Nutricional Junaeb 2021, donde el sobrepeso en menores de edad, alcanzó el 25,4%, y el bajo paso, representaba el 1,3 por ciento.
Entre los factores que contribuyen al sedentarismo, se encuentra el auge de las pantallas, con videojuegos, películas y series en diversas plataformas, factores genéticos o ambientales, predisposición familiar a la obesidad, que se produce con la transmisión de malos hábitos alimenticios, a lo largo de las generaciones, más que con factores propiamente genéticos.
Posteriormente al crecer y llegar a la mayoría de edad, se observa una predisposición a seguir con esos hábitos poco saludables, provocando problemas hormonales, como el hiperinsulinismo y la resistencia a la insulina.
Los problemas al metabolismo, generan una alteración al funcionamiento regular del organismo, afectando los receptores de insulina, generando un círculo vicioso, aumentando de peso y apetito, requiriendo tratamientos médicos, junto a las consultas con nutricionistas, que puedan dar consejos para el control y disminución del sobrepaso.
Los infantes al consumir alimentos con alto contenido calórico, grasas, azúcar y sal, producen un desequilibrio entre su ingesta energética y el gasto calórico, sumado a la escasa actividad física, provocando diversos problemas médicos.
Otro factor relevante es la percepción distorsionada de los padres sobre el estado nutricional de sus hijos, lo que dificulta la identificación y abordaje de la obesidad infantil como un problema de salud. combinación de factores que constituyen un reto importante, requiriendo acciones integrales y coordinadas para revertir la tendencia y promover hábitos de vida más saludables en la población infantil en Chile.