La Colina de Nervión
·11. Januar 2025
La Colina de Nervión
·11. Januar 2025
Uno de esos partidos de más tres puntos para el Sevilla FC, este fue el comienzo liguero de un 2025 que empezó, en cuanto a noticias, de la peor manera posible. La derrota en Almería, junto a una imagen muy pobre de los de García Pimienta, hundió la moral de una afición con mucho hartazgo en sus espaldas. Una, de nuevo, convulsa Junta General de Accionistas provocó que los focos de la previa no estuviesen en el césped. Sin embargo, la atención no debía descentrarse mucho. Finalmente, cuando todo apuntaba a que el Valencia CF se llevaría el gato al agua, pasó lo inesperado.
Tarde complicada en el Ramón Sánchez-Pizjuán. En uno de esos partidos trampas para el Sevilla FC, la intención para los de García Pimienta era mejorar esas sensaciones de una semana de noticias negativas. Aunque, al menos en ese sentido, nada salió para contentar a la afición. Un apático equipo apenas era incapaz de generar ocasiones, con una salida de balón errática y un intento de creación que solía quedarse en nada. De hecho, lo más interesante de los primeros 45 minutos fue el marcador, ya que se proyectó la imagen de Monchi y Jesús Navas juntos en el palco del Ramón Sánchez-Pizjuán. Para que eso fuese lo mejor, ya se puede explicar como fue el resto.
Tanto los hispalenses como el Valencia CF apenas contaron con ocasiones, siendo Isaac el que tuvo la más clara que supo solventar Mamardashvili. Si hubiese que señalar alguien, en un sentido negativo, ese sería Saúl Ñíguez. Una pérdida de balón en la frontal del área supuso una ocasión peligrosa para los ches, añadiendo una bronca de la afición debido al mal juego del equipo. Tras un primer duelo nulo, los jugadores se marcharon al descanso sin ver puerta y entre gritos en contra de la directiva nervionense.
Si en la primera parte ya se destacaba la incapacidad de poder definir el juego hispalense, la segunda estuvo elevada al cuadrado. Cambios de posiciones de ciertas piezas apenas provocaron un cambio, siendo el ritmo y la cadencia nulos. Si antes se destacó a Isaac por ser de los pocos que contuvieron el ataque hispalense, ya ni esa bala le salió a García Pimienta. Todo hacía indicar que, excepto que alguien aprovechase la suya, el encuentro no iba a pasar por un terremoto ofensivo. Esa excepción acabó llegando de las botas de un Luis Rioja, bético confeso, que provocó que la grada del Sánchez-Pizjuán explotase en contra de lo que estaba aconteciendo en el césped.
Luis Rioja, en el encuentro frente al Sevilla FC | Imagen: Fran Santiago-Getty Images
La salvación para los sevillistas llegó de la mano del recién llegado Rubén Vargas. El suizo fue capaz de revolucionar las internadas de los de García Pimienta, llegando a contar con un palo tras un disparo desde fuera del área y varios destellos individuales en la banda. Pero, cuando dependes de una única pieza, nada acaba acompañando. Esa reacción, con una mayor enfoque en área rival, no se tradujo en hechos claros, que fueron provocando que el ambiente se fuese caldeando. Finalmente, la suerte se acabó volcando hacia los de Nervión, que vieron al portero rival como su mayor aliado para que el disparo de Pedrosa se colase dentro de la portería. Un empate, y con mucha suerte, para un equipo que se marchó pitado del terreno de juego.
0-1 (Minuto 60): Luis Rioja, en una cabalgada personal, supera a Gudelj y bate a Nyland para adelantar al Sevilla FC.
1-1 (Minuto 90+2): Pedrosa, con un disparo desde fuera del área, ve al portero del Valencia CF como su mejor aliado para acabar rescatando un empate.
Este empate provoca noticias negativas tras un encuentro nulo del Sevilla FC, que ya ve como ha sido capaz de solventar uno de esos partidos claves en el devenir de una temporada. Tras este encuentro, tocará una visita complicada al norte de España. El próximo sábado 18 a las 14:00, los de García Pimienta deberán visitar Montilivi para enfrentarse al Girona CF. Un rival duro que, a pesar de la diferencia de plantilla, se encuentra en una posición similar a los hispalenses.