MuyDeFútbol
·2 January 2025
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La ínfima inversión económica por parte de la propiedad da lugar a que Garagarza se reinvente para confeccionar una plantilla que evite el descenso a Segunda. En este caso, el Espanyol se hace con los servicios de Pablo Ramón, un central diestro de veintitrés años que apuntalará las prestaciones de la zaga espanyolista.
Pablo Ramón vistiendo la elástica del Mirandés en LaLiga Hypermotion. Fuente: Pericos Marca
En julio, Mao Ye y Fran Garagarza viajaron hasta Madrid para reunirse con José Ángel Sánchez, el director general del club blanco. En dicha reunión se pactó la compra de Pablo Ramón a mitad de temporada. Esto es debido a que antes debía recuperarse de su lesión en el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. De hecho, este curso no se ha estrenado y no juega desde abril de 2024 cuando estaba cedido en el Mirandés, es decir, hace más de ocho meses. Por lo tanto, el mallorquín acarrea una falta de ritmo competitivo considerable.
Pese a que sí se cerró la llegada de Pablo Ramón, el CEO y el director deportivo pericos no pudieron concretar otros movimientos que tenían en mente. Véase las cesiones de los centrocampistas Mario Martín y Nico Paz e incluso del delantero Álvaro Rodríguez.
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