Aquí hay tomate. Lo que nadie explica sobre el pichichi y Bota de Oro de Kylian Mbappé | OneFootball

En el Barça lo tienen claro: los 42 goles de Robert Lewandowski no han sido suficientes para volver a ganar el Pichichi. Y tampoco la Bota de Oro.

Los dos galardones se los lleva Kylian Mbappé, que se ha beneficiado del privilegio que supone ante los árbitros lucir el escudo del Real Madrid.

Kylian Mbappé ha sido coronado como Bota de Oro y Pichichi europeo con 31 goles en LaLiga. La maquinaria mediática del madridismo ya lo celebra como el nuevo rey del gol, pero hay un dato que nadie quiere contar: 7 de sus 31 goles fueron de penalti. Y si se restan esos tantos desde los once metros, Mbappé y Lewandowski empatan a 24 goles en jugada real.

Lewandowski ha marcado los mismos goles que Mbappé sin penaltis | Getty Images, Madrid-Barcelona

El delantero francés llega al Real Madrid en su primer año en España y se lleva todos los focos. Pero sus cifras están infladas por la ventaja blanca: en el Bernabéu los penaltis tienen dueño fijo.

En cambio, Lewandowski solo tiró 3 penaltis esta temporada, marcando 27 goles totales. Si hablamos de goles en juego abierto, el polaco sigue en lo más alto, a sus 36 años.

Mbappé, el rey del penalti en el Real Madrid

No es casualidad que los penaltis los lance siempre el mismo en el Madrid. La llegada de Mbappé ha desplazado incluso a Vinicius del punto de penalti. Y eso tiene impacto directo en el marcador y en los premios individuales.

Si desglosamos los números, la diferencia se reduce drásticamente:

Mbappé: 31 goles (7 de penalti) → 24 en juego

Lewandowski: 27 goles (3 de penalti) → 24 en juego

El resultado: empate técnico, pero con un trato muy distinto por parte de los medios.

Lewandowski se ha visto perjudicado por el trato arbitral desfavorable que ha sufrido el Barça con los penaltis | Getty Images

La Bota de Oro más discutida

¿Debe valer lo mismo un penalti que un gol en jugada? Muchos expertos lo cuestionan, y en este caso la estadística revela una realidad incómoda para el madridismo. El galardón individual de Mbappé no refleja superioridad futbolística, sino ventaja institucional.

Y no es la primera vez que ocurre. En el Barça los penaltis se reparten y no hay jerarquías férreas. Mientras que en el Madrid la prioridad es clara: engordar las cifras del fichaje estrella.

Lewandowski resiste con dignidad

A pesar de la edad, Lewandowski ha vuelto a demostrar que sigue siendo uno de los mejores goleadores del planeta. Sin penaltis, su rendimiento es idéntico al de un Mbappé que llega en plenitud física. Pero los focos, como siempre, apuntan a la Castellana.