Arnau Martínez lo tiene claro | OneFootball

Lejos está el ritmo frenético de competición del Girona FC de la temporada pasada a esta y eso se ve claramente reflejado en los propios fichajes del pasado mercado. El cartel de unos y otros están a años luz, aunque el equipo de Míchel trabaja tranquilo sin esa presión acumulada. Su clasificación para la Champions parecía la guinda del pastel al proyecto del técnico de Vallecas, pero por ahora no se están consiguiendo los objetivos. Las dificultades para llenar el estadio por las normativas de la UEFA y los groseros desajustes defensivos están castigando demasiado al equipo. Sin embargo, la dirección deportiva apostó por seguir una línea continuista y no realizar ningún tipo de revolución. Su capitán, Arnau Martínez, es un claro ejemplo pese a las críticas de cierta parte de la afición contra el lateral.

Los resultados no llegan

Los gerundenses marchan en una undécima posición. Ligeramente alejados de los puestos europeos, solo están a 2 puntos, aunque las sensaciones no son las mismas. Al equipo le cuesta, está algo tosco y comete errores flagrantes. La pizarra de Míchel ha podido resolver ciertas situaciones, pero no les da para competir ante los grandes. La prueba de fuego en Europa frente a equipos como el PSG y Feyernood o en LaLiga ante el FC Barcelona, hacían presagiar que no iba a ser lo mismo.

Arnau Martínez pelea por un balón en un lance de juego I Foto de: Juan Manuel Serrano Arce/Getty Images

Acostumbrados a bajar al barro, su entrenador se encargó en su día de poner al equipo con los pies en el suelo. Los fichajes del mercado no iban a igualar el listón de los Dovbyk, Sávio o Aleix García, pero sí que se postulaban como apuestas dispuestas a reinventarse. El exsevillista Bryan Gil, es uno de esos que les da color ahora al equipo, pero no es suficiente con el joven canterano hispalense. Alguna que otra falta de concentración, acierto de cara a puerta y contundencia en la zaga ponían en tela de juicio la fiabilidad para colocarse en la cabeza de la clasificación.

Arnau Martínez, el talismán del Girona FC

Sin embargo, el grupo trabaja a gusto en Montilivi y la confianza en Míchel es total. Alejados del ruido mediático, saben que su momento puede llegar en cualquier momento y para ello deben estar preparados para afrontar el gran reto. Su capitán, Arnau Martínez, que en este curso recuperaba la titularidad tras la marcha de Yan Couto en el mercado de fichajes, está dispuesto a dejarse la piel: “Decidí renovar porque quería hacer historia aquí, el Girona FC es mi casa”. Unas declaraciones que dejaba en el programa de radio Que t’hi Jugues de la Cadena SER. El lateral esperó hasta los últimos días de mercado para firmar la extensión de su contrato hasta 2027.

A sus 21 años ha jugado más de 130 partidos con esta camiseta y no le tiembla el pulso para lucir ese brazalete. Su rol en el equipo ahora es otro y a estas alturas ya acumula 4 titularidades completando los 90 minutos. El jugador sabe lo que tiene que hacer en cada momento y pese a que todavía tiene margen de mejora, es uno de los baluartes de Míchel por el costado diestro.