Diario La Escuadra
·25 de noviembre de 2024
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·25 de noviembre de 2024
La jornada 13 de Segunda RFEF nos dejó un encuentro vibrante entre el CDA Navalcarnero y la UD Melilla en el estadio Mariano González. Ambos equipos buscaban mejorar sus rachas recientes, con el conjunto local tratando de consolidarse en la parte media de la tabla, mientras que los visitantes peleaban por salir de los puestos de descenso. El resultado final reflejó un intenso intercambio de goles y emociones.
El partido comenzó con el CDA Navalcarnero buscando dominar el balón, pero fue la UD Melilla quien tocó primero. En el minuto 6, Alonso adelantó a los visitantes tras un saque de esquina bien ejecutado , superando al portero Óscar López. Este gol temprano fue un golpe que obligó al equipo local a buscar la reacción rápidamente.
Jugador de la UD Melilla celebra su gol con un gesto hacia la afición. Este tanto adelantó a su equipo en los primeros minutos del partido. Fuente: Redes sociales oficiales de la UD Melilla.
El Navalcarnero intentó responder con jugadas combinadas, destacando una acción en la que Enrique dejó pasar el balón para Claverías, quien remató, pero el esférico se paseó sin entrar en la portería. Minutos después, los locales reclamaron un posible penalti tras un agarrón sobre Rober en el área, pero el árbitro dejó seguir el juego.
Por su parte, el Melilla mantuvo una sólida defensa, pero también sufrió amonestaciones. Corbalán recibió la primera amarilla tras una falta sobre David Rodríguez. La intensidad del encuentro fue en aumento, con ambos equipos luchando por el control del esférico.
El final de la primera mitad tuvo momentos de tensión, incluido un choque de cabezas entre Ceballos y Peque que obligó a detener el juego brevemente. A pesar de los esfuerzos rojiblancos, el marcador no se movió antes del descanso.
La UD Melilla se fue al descanso con una ventaja de 1-0 gracias al gol de Alonso. Aunque el CDA Navalcarnero tuvo oportunidades para igualar, la defensa visitante y la falta de acierto mantuvieron a los locales en desventaja.
La segunda mitad comenzó bajo una lluvia constante que complicó las condiciones del terreno de juego. Sin embargo, esto no detuvo a los jugadores, que salieron con aún más energía. Los entrenadores realizaron sus primeros cambios: Ramos ingresó por el Melilla y Verdú por el Navalcarnero.
El Melilla buscó ampliar su ventaja con insistencia. Un disparo raso fue detenido por Óscar López con una gran parada, y el rebote dejó una ocasión clara que Espinosa despejó de cabeza bajo palos, manteniendo vivo al Navalcarnero.
La reacción local no se hizo esperar, y en el minuto 65 llegó el empate. Enrique logró marcar tras un excelente centro de Claverías, desatando la alegría en la grada. Este gol inyectó confianza al equipo rojiblanco, que siguió presionando. Poco después, Enrique volvió a ser protagonista, pero su intento fue bloqueado por Ramos, quien desvió el balón a córner.
Enrique celebra junto a sus compañeros tras marcar el gol del empate para el CDA Navalcarnero. Un momento de alegría para el equipo local. Fuente: María, community manager y jefa de prensa del CDA Navalcarnero.
El gol del empate obligó al Melilla a replegarse, pero esto no evitó que siguieran generando peligro. En una de sus mejores oportunidades, un disparo desde el borde del área rozó el larguero, provocando el nerviosismo de la defensa local.
Los últimos minutos del partido estuvieron llenos de emoción y tensión. En el minuto 86, Ewan, recién ingresado al terreno de juego tras varias jornadas fuera por lesión, anotó de cabeza el 2-1 para el Navalcarnero, dando vuelta al marcador y encendiendo el estadio Mariano González. Sin embargo, la celebración fue breve, ya que Souza, uno de los jugadores rojiblancos, tuvo que ser atendido por molestias en el muslo derecho, aunque pudo regresar al campo.
Con el tiempo añadido, el Melilla no se rindió y buscó el empate con determinación. En el minuto 94, Iván Fernández aprovechó un balón suelto en el área para marcar el 2-2 , asegurando un valioso punto para los visitantes. El tanto desató el júbilo entre los jugadores melillenses, mientras el Navalcarnero lamentaba no haber podido mantener su ventaja en los minutos finales.
El CDA Navalcarnero y la UD Melilla ofrecieron un partido lleno de intensidad, emoción y lucha constante. Ambos equipos mostraron momentos de brillantez, pero también debilidades que fueron aprovechadas por su rival. El empate final refleja la igualdad que hubo en el terreno de juego, dejando a los locales con un sabor agridulce ya los visitantes con la esperanza de seguir sumando para salir de la zona de descenso.
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