La Colina de Nervión
·6 de noviembre de 2024
La Colina de Nervión
·6 de noviembre de 2024
Los últimos resultados del Real Madrid han hecho saltar la luz de alarma en la capital. Los datos hablan por sí solos: el cuadro blanco no encadenaba dos partidos seguidos perdiendo en el estadio Santiago Bernabéu, y recibiendo al menos siete goles, desde hace 15 años, cuando cayó ante el FC Barcelona por 2-6 y el Mallorca por 1-3. La derrota ante el Milan ha abierto una pequeña crisis deportiva en la que jugadores señalados como Tchouameni han sido señalados. El conjunto blanco intentará cerrar el próximo sábado ante Osasuna. El Real Madrid se plantea fichajes y necesita un respiro.
El técnico madridista, Carlo Ancelotti, es consciente de que comienza a tener un problema táctico en la temporada 2024-2025. El entrenador italiano lleva toda la temporada realizando probaturas para consolidar el mediocampo y encajar al recién llegado Mbappé; ha probado con un dibujo con un 4-4-2 y con el tradicional 4-3-3, llegando a cambiar de esquema durante el desarrollo de los partidos. Ancelotti ha reconocido abiertamente que el equipo no termina de carburar: “tenemos que mejorar las cosas e intentar encontrar la solidez que hemos tenido durante mucho tiempo y que nos está faltando. Hemos encajado nueve goles en los últimos tres partidos y eso es demasiado”.
Tras la derrota en Champions, el mediocentro Aurelién Tchouameni está en boca de la parroquia merengue y se ha convertido en el objetivo de las críticas. El jugador francés, recientemente lesionado, está lejos de su mejor versión y la sombra de Kross empieza a planear sobre él. Sus últimas actuaciones ante FC Barcelona y Milan han sido realmente decepcionantes, y el mediocampo madridista ha hecho aguas, mostrándose débil, lento y dubitativo. La exigencia y la presión en el Real Madrid —un equipo cuyo mediocampo ha sido una verdadera roca en el último lustro— es máxima y Tchouameni lo está sintiendo de cerca.
Aurelien Tchouameni, en un partido contra el Real Valladolid. | Imagen: Getty Images. Copyright:Gonzalo Arroyo Moreno
Los principales analistas deportivos ya habían avisado que este curso sería difícil sin Kross y con un Modric en la recta final de su carrera. El runrún con Tchouameni viene de lejos. Las prestaciones en las dos últimas derrotas ante rivales históricos como el Barça y el Milan han sido manifiestamente mejorables. El francés, que quedó retratado en los dos primeros goles de los italianos, fue sustituido al descanso e incluso fue silbado por su propia afición.
En cualquier época de crisis surgen los rumores de fichajes; es una constante en el mundo del fútbol. Ocurre que el centrocampista del Chelsea Moises Caicedo está despuntando en los últimos encuentros. Fuentes cercanas al Real Madrid aseguran que se baraja su nombre en las oficinas del Bernabéu como sustituto de Aurelién Tchouameni. En la última jornada de la Premier League fue, sin duda, el mejor jugador de campo ante el Manchester United. Caicedo además anotó el gol del empate. La sensación en Inglaterra es que está dando un paso adelante en su segunda temporada en el club. Este año ya lleva un gol y dos asistencias; y aún le quedan tres cuartos de temporada por delante.
Es un jugador que gusta mucho a la dirección deportiva del Real Madrid, que ya trabaja en el apartado de fichajes, y que podría otorgar al centro del campo merengue la solidez que necesita. Ayuda también su juventud: el jugador ecuatoriano tiene tan solo 23 años. Los más viejos del lugar lo comparan con una vieja gloria madridista: Claude Makelele. Está por ver si el interés del Real Madrid puede concretarse con una oferta firme en el mercado de invierno.