Balonazos
·3 de mayo de 2025
El Legado de Farías y Dudamel en Colombia

Balonazos
·3 de mayo de 2025
En el folclore musical caribeño, el puertorriqueño Ismael Miranda, un cantante antológico del género salsa, tiene una pegajosa canción titulada: ¡Abran Paso! Nos apropiamos de esa frase corta para calificar la carrera en paralelo que sostienen dos directores técnicos venezolanos en Colombia: el sucrense César Farías y el yaracuyano Rafael Dudamel, dos auténticos trotamundos del fútbol que, hoy día, quienes desarrollan sus vibrantes y brillantes carreras en la primera división del vecino país. Puede sonar exagerado, pero una vez que mostraron su clase en Venezuela, la liga local les resultó pequeña.
El pasado sábado 26 de abril, la Liga BetPlay sirvió de escenario para un duelo curioso entre estos coterráneos. Farías, al frente del Junior, y Dudamel, conduciendo al Deportivo Pereira, protagonizaron un encuentro cuyo resultado le fue favorable al ex portero de la Vinotinto. Esta victoria cortó la racha de su archirrival de 10 juegos sin conocer la derrota, enriqueciendo así el anecdotario del fútbol venezolano, una especialidad que estos dos personajes se encargaron hace tiempo de enaltecer para borrar, de una vez por todas, el prejuicioso, estigmatizador y despreciativo remoquete de “Cenicienta”.
Es que el fútbol venezolano estuvo muchos años sumergido en un sinfín de actuaciones y polémicas que no permitieron su desarrollo pleno, hasta que varios personajes, muy en especial estos dos, desde sus respectivas trincheras se encargaron de romper todos los pronósticos desfavorables. Actualmente, no solo sirven para potenciar el balompié de Venezuela, sino que, además, están llevando su clase e irreverencia hasta los confines del fútbol internacional como técnicos aclamados y respetados.
Farías y Dudamel no son solo entrenadores exitosos en Colombia; son pilares de la historia reciente de la Vinotinto. Ambos la dirigieron en categorías juveniles y mayores, dejando un legado imborrable. Farías, por ejemplo, marcó un antes y un después al llevar a la Vinotinto a las semifinales de la Copa América 2011, además de clasificar a la Sub-20 al Mundial de 2009. Dudamel, por su parte, estuvo al frente de la selección absoluta, sumando un histórico subcampeonato mundial Sub-20 en 2017 en Corea del Sur.
A ver, otro aspecto que los eleva al Olimpo del fútbol venezolano: el sucrense empezó dirigiendo en Venezuela y, como buen trotamundos, pasó luego a México, India, Paraguay, Bolivia, Ecuador y ahora Colombia, exhibiendo trofeos de campeón en Bolivia (The Strongest) y Ecuador (Aucas). Hoy aspira a lo mismo en Colombia gracias a los 30 puntos que suma el Junior, cuarto en la tabla de la primera división neogranadina.
Dudamel, por su parte, tanto en la portería como en la dirección técnica siempre ha sido un faro luminoso. Dirigió al Deportivo Lara y posteriormente, estuvo al frente de la selección Vinotinto logrando un histórico subcampeonato mundial Sub-20. Su trabajo con las bases juveniles fue clave para el crecimiento del fútbol venezolano. Y si de trofeos máximos internacionales se trata, luego de su paso por clubes de Brasil, Chile, y México, alcanzó el campeonato colombiana con el Atlético Bucaramanga, ¡Clase pura, pues!
El impacto de los técnicos venezolanos trasciende fronteras, claramente. Aparte de Farías y Dudamel, nombres como Richard Páez, campeón con Millonarios, Francesco Stifano y Pedro Depablos han dejado huella en Colombia. Demostraron que el talento criollo en los banquillos está en alza. En un fútbol cada vez más competitivo, Farías y Dudamel son prueba viva de que Venezuela no solo exporta jugadores. También a mentes estratégicas capaces de conquistar ligas foráneas. El duelo del 26 de abril fue más que un partido. Fue un capítulo más de una generación dorada de entrenadores vinotintos que sigue escribiendo su historia de cara al futuro. Veremos.
Comentarios del Fútbol Sin Pausa a @nestor_beaumont