Revista MadridistaReal
·23 de diciembre de 2024
Revista MadridistaReal
·23 de diciembre de 2024
Después de la tormenta, la calma. Muchas han sido las piedras por el camino que ha tenido que sortear el Real Madrid hasta el periodo navideño, pero, al fin, el conjunto madridista se marcha de vacaciones habiendo devuelto las aguas a su cauce habitual. El proceso, arduo, espinoso y cargado de imprevistos a modo de lesiones y malos resultados, ha instaurado en última instancia una felicidad total en Chamartín. Con los tres puntos cosechados ante el Sevilla en la despedida de Jesús Navas del fútbol profesional (4-2), los chicos de Carlo Ancelotti efectuaron el ‘sorpasso’ al FC Barcelona. Y el Atlético se ve más cerca.
«Os deseo a todos una Feliz Navidad, llegamos todos vivos, incluidos vosotros», comentó el propio Carletto en la rueda de prensa posterior al triunfo liguero frente a los andaluces. Una tarea, la de marcharse a Navidad en la pugna por todos los títulos y obteniendo victorias, que ya había puesto encima de la mesa el técnico blanco en anteriores comparecencias ante los medios de comunicación. Quizá por ello, en pos de poner punto y final al 2024 con contundencia, el Madrid se empleó a fondo desde el primer minuto y firmó un encuentro excelso en la visita del cuadro de García Pimienta al Santiago Bernabéu.
Angel Martinez/Getty Images
Mbappé y Fede Valverde se encargaron de deleitar al feudo de la Castellana mediante dos obuses imparables. Luego, también se unieron al festín del gol Rodrygo y Brahim. El nivel, alcista, era tan alto que apenas se notaba la ausencia del reciente campeón del The Best, Vinicius, que no pudo vestirse de corto tras ver la quinta cartulina amarilla la semana pasada en Vallecas. A modo de despedida de año, la exhibición del Madrid estaba siendo de matrícula de honor, un regalo adelantado de Reyes. En cambio, en el fútbol, siempre suelen aparecer pequeños jirones, así que el Sevilla los aprovechó y, al menos, pudo amainar el dolor del traspié.
El Bernabéu, emocionado por el adiós de Navas, despidió a sus jugadores con una ovación a la altura de la situación actual del club madridista: reciente triunfador de la Copa Intercontinental, cerca del liderato liguero y resurgido en Champions. La música de viento de hace unas semanas… cambió por unos aplausos atronadores que suponen una dosis de moral en todo el plantel capitalino, que ha sabido salir del hoyo y recuperar su linaje habitual. La coraza ante las mal dadas, surge efecto.
Son tan halagüeñas las sensaciones en el Real Madrid que el inicio del 2025 se barrunta positivo. Muy exigente, pero motivador. Desafiante. Ese tipo de retos gustan e incentivan en un conjunto de Carlo Ancelotti que en el mes de enero disputará, como mínimo, un total de siete partidos en cuatro competiciones distintas (Valencia, Atlético Minera, Mallorca, Las Palmas, Salzburg, Real Valladolid y Stade Brestois). Aunque podrían ser ocho en caso de jugar la final de la Supercopa de España que dirimirá campeón en Yeda (Arabia Saudí), lar donde los blancos pelearán por el tercer entorchado de la temporada, siguiendo así la ruta del ansiado septete.