En Boca llegó la hora de Equi Fernández como titular | OneFootball

El ingreso de Ezequiel Fernández ante Banfield (por Óscar Romero en el arranque del 2º tiempo) fue clave para inyectarle espíritu a un equipo que estaba desorientado desde el gol de Quiroz a los 28′. El pibe de 20 años se adueñó del mediocampo, imponiéndose incluso por encima de jugadores como Alan Varela y Pol Fernández. Todo indica que ‘Equi’ superó el nerviosismo de los primeros partidos en Primera con la camiseta xeneize y demostró ante el Taladro que tiene lo que hace falta para ser titular en este equipo.

Hugo Ibarra probablemente le devuelva la titularidad que el pibe había perdido por la expulsión ante Vélez (sancionado, no jugó ante Defensa y Justicia): es número puesto para jugar desde el arranque frente a Instituto, el domingo a las 19:00 en la Bombonera. De hecho, quizá el ‘Negro’ saque para ese partido a Varela y Pol Fernández para rearmar el mediocampo con Payero y ‘Equi’.

Los otros señalados por Ibarra que perderían su lugar

Además de los volantes, ante Banfield quedó expuesto el bajo nivel de Luis Advíncula y Sebastián Villa, por lo que el DT puede dar un volantazo fuerte ante la Gloria, sustituyendo al peruano por Marcelo Weigandt. Reemplazar a Villa no será tan simple, porque Exequiel Zeballos sigue lesionado, y para utilizar a Briasco o Merentiel deberá tocar su esquema preferido, el 4-2-3-1, para acomodarlo a un dibujo mucho más tradicional, el viejo y confiable 4-4-2.

Los dos clubes europeos tras la pista de Equi Fernández

El pibe de Boca ya despierta el interés de Europa. Aunque tiene contrato hasta diciembre de 2025 con el club de la Ribera (y un valor estimado en 5 millones de euros), tanto el Brighton de la Premier League como el Villarreal de España aparecen como posibles destinos para el volante. De hecho, el Alexis Mac Allister, del club inglés, lo llenó de elogios hace pocas semanas: «Si Brighton me preguntara le diría que lo traigan a “Equi” sin dudas. Es un jugador que me gusta mucho, puede jugar con ambas piernas o de interno. Entiende mucho el juego».