Flick ejerce de bombero. Se cargó los discursos y lo que se preparaba contra el Madrid | OneFootball

Hansi Flick ha llegado al Barça como entrenador, pero su papel en las últimas horas ha sido más el de bombero. El técnico alemán tomó una decisión que ha sorprendido dentro del vestuario y en la cúpula culé: canceló todos los discursos previstos durante la celebración de los tres títulos del Barça.

Cánticos preparados contra el entorno mediático del Real Madrid

¿Por qué? Porque sabía lo que se estaba preparando. Algunos jugadores, aún con la sangre caliente, habían preparado mensajes y cánticos dirigidos al Real Madrid.

Y también a ciertos medios de comunicación de la capital que, durante toda la temporada, han ninguneado al Barça con lo de “equipo de niños”.

Flick ya había eliminado cualquier conato de celebración tras ganar en Cornellà por respeto y concentración. Y luego volvió a actuar con mano firme antes de que estallara la polémica.

No quería que una fiesta deportiva se convirtiera en un campo de batalla mediático. Y logró su objetivo.

La guerra verbal se congela... por ahora

En la rua sí se escuchó algún cántico con mensaje velado, pero lo de Montjuïc podía haber ido mucho más lejos. Flick lo sabía y decidió cortar por lo sano. No habrá vídeos virales, no habrá cortes manipulados, no habrá carnaza para la prensa madridista.

El técnico alemán cree que la mejor respuesta es la que se da en el campo. Y ahí el Barça ha hablado alto y claro con tres títulos en una temporada histórica. Flick quiere que su Barça hable con fútbol, no con micro en mano.

En el club valoran su templanza y su capacidad para evitar una guerra innecesaria a las puertas de otro clásico. Flick ha demostrado carácter… y cabeza.

Pero lo que es innegable es que la plantilla barcelonista ha sufrido ataques y desprecios constantes desde la capital de España. Se entiende que los jugadores tuvieran ganas de desfogarse con tres títulos a quienes habían dudado de su calidad.

Flick les convenció de que no valía la pena. Ni ganando diez Champions seguidas cambiarán de opinión al periodismo de bufanda que impera en la capital. Y no ganaban nada declarando la guerra de forma frontal.

Gracias a Flick el Barça tiene un frente menos al que atender.