Afición Deportiva
·6 de febrero de 2024
Afición Deportiva
·6 de febrero de 2024
El jugador sueco, Isak Jansson, jugará cedido en la capital austríaca. Las pocas oportunidades y su aclimatación al país, claves en su marcha.
El cierre del mercado de fichajes invernal en el Cartagonova fue el esperado. La llegada urgente de un reemplazo en la portería, con la incorporación de Tomás Mejías, y la llegada de Darío Poveda en la punta de ataque. A lo largo de las altas y bajas en el FC Cartagena, habían rumores de la salida de Isak Jansson. En la presentación de Andy Rodríguez, el propio director deportivo, anunció que «había una oferta por Jansson, pero ni nos convence a nosotros ni al jugador». Las declaraciones de Manolo Breis provocaron un ambiente de incertidumbre sobre la marcha del extremo sueco, hasta Julián Calero respondió por su posible marcha. La salida de Isak Jansson crea un giro inesperado para cubrir un puesto de extremo que ha sufrido pérdidas (Embaló, Jonny, Ferreiro o Hevel).
El verano de 2022 aterrizó un jugador prometedor en el FC Cartagena, desde el Kalmar FF ( equipo de primera división sueca). El equipo albinegro pagó más de 250.000 euros por derechos formativos y un contrato hasta 2025, opcional hasta el 2027. A pesar de su actual potencial, no ha podido ser protagonista y destacar en el efesé. A nivel estadístico, lleva 50 partidos oficiales con 3 goles y asistencia. Una cuantía tímida a nivel numérico y con unas sensaciones de poca comodidad y aclimatación, ya sea dentro del vestuario o a nivel cultural, tras una temporada y media.Su salida ofrece muchos supuestos por una de las grandes apuestas, dentro del proyecto de Belmonte. La cesión puede permitir un contexto favorable para obtener minutos, ofrecer un gran rendimiento y visualizar el potencial que se esperaba en Cartagena. O, desde el punto de vista financiero, una subida en el valor del jugador, para así venderlo y generar una venta que favorezca a las arcas albinegras.