Dosis Futbolera
·12 de noviembre de 2021
Dosis Futbolera
·12 de noviembre de 2021
Dos errores increíbles de Zeqiri y Jorginho, este desde el punto de penalti, cuando el partido agonizaba hicieron efectivo el armisticio que firmaron durante el segundo tiempo Italia y Suiza en la noche de hoy en el Olímpico de Roma. En el primer tiempo, Widmer y Di Lorenzo reflejaron en el marcador la gran igualdad existente entre italianos y suizos
Se esperaba una noche complicada hoy para Italia en su penúltimo envite de las clasificatorias europeas al mundial 2022. Suiza es un conjunto muy correoso que ante las grandes selecciones casi siempre ofrece su mejor versión. Y si a eso le unes que sorprendentemente Italia salió anestesiada al partido pagándolo rápidamente. Carrera al espacio de Okafor, un tormento para la defensa italiana y dejada para la llegada de segunda línea de alguno de sus compañeros.
Llego el lateral derecho Silvan Widmer que no quiso discusiones con nadie y puso el 0-1 con un durísimo disparo que se coló como una exhalación en la portería de Donnarumma. Tras el gol los de Mancini despertaron y comenzaron a poner cerco a la portería de Sommer. Primero llegaron los lanzamientos de media distancia, después los centros laterales…
En uno de estos últimos el buen portero suizo Sommer fallo. Muy buen cobro de una falta lateral por parte de Insigne, hacia una zona donde había varios compañeros muchos de ellos en fuera de juego. Sommer se comió el centro, quizá estorbado por alguno de estos jugadores pero no por el autor del 1-1 para Italia, Di Lorenzo. El lateral del Napoli puso las tablas en el marcador e hizo recobrar el pulso a todo el Olímpico que veía como los fantasmas del anterior camino al mundial sobrevolaban Roma.
Busco Italia desnivelar el marcador antes del descanso pero no lo consiguió. Ya metidos en la segunda parte y ante el tedio que podia dormir a Italia, Mancini despertó a los suyos con dos cambios acertados. Entraron Berardi y Tonali por Locatelli y Belotti, con las sustituciones Italia dio un paso adelante, eso si sin hacer intervenir en demasía a Sommer.
Suiza, plagada de bajas, bastante tenia con aguantar el 1-1. En los estertores del partido varios sucesos quisieron jugar en contra del armisticio que parecían haber firmado Suiza e Italia. Primero Anthony Taylor demostró nuevamente que es un arbitro horrible, teniendo que señalar a instancias del VAR un evidente penalti de Ulises García sobre Berardi. El empujón por la espalda del suizo sobre el italiano es evidente.
Jorginho, quizá condicionado por el penalti que le atajo en Basilea Sommer hace dos meses, mando el penalti a la Fontana de Trevi. Cuando parecía que todo quedaría así, sucedió otro suceso que parecía querer conspirar contra el armisticio. Donnarumma dejo un balón muy corto dentro de su área pequeña. Circunstancia idónea para que un optimista de la presión como Zakaria entregara en bandeja de oro a Zeqiri un balón idóneo para dejar a Suiza a falta del sello en los pasaportes para Qatar.
Zeqiri, un convencido del armisticio, no solo no aprovecho el regalo sino que creemos que ni supo que lo tenia. Le paso por encima el momento. Firmado el armisticio entre Italia y Suiza, en el grupo C todo se resolverá en la última jornada.
Italia para ir al mundial 2022 ha de ganar y no perder la ventaja de dos goles que tiene en la diferencia general de goles sobre su rival de hoy, Suiza. Los partidos serán Irlanda del Norte vs. Italia y Suiza vs. Bulgaria el próximo lunes a partir de las 20:45.