Diario UF
·12 de agosto de 2020
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Roberto Baggio nació el 18 de febrero de 1967 en Caldogno, un municipio de 10.000 habitantes en la provincia de Vicenza. Durante su carrera deportiva, Roberto Baggio vistió la camiseta del Vicenza, AC Fiorentina, Juventus de Turín, AC Milán, Bologna, Inter de Milán y Brescia. Además de todo ello, fue internacional con la selección de Italia durante 11 años.
Debutaría con el primer equipo con tan solo 15 años. Con el equipo biancorroso, el jugador italiano empezaría a mostrar su talento para darse a conocer en el fútbol italiano. El delantero sería una de las piezas claves en el ascenso del conjunto italiano a la Serie B, es decir, a la segunda división del fútbol italiano.
En su último partido como jugador del Vicenza, sufriría una grave lesión en su rodilla derecha. Esta lesión le hizo perderse la fiesta del ascenso.
En sus 3 temporadas, disputó un total de 47 partidos anotando 16 goles:
Cuando Roberto Baggio sufrió su lesión de rodilla, ya había firmado por la Fiorentina. Debido a dicha lesión, el delantero italiano tendría que esperar un año y medio para debutar con el equipo viola gigliati.
Su debut en la Serie A llegaría en 1986 contra la Sampdoria. No tardaría en hacerse un hueco en la plantilla y por ello, se convirtió en el ídolo de la afición gracias a su fútbol elegante añadido a su gran facilidad de ver portería.
En la temporada 1989/90 se produjo su explosión final. Fue el segundo máximo goleador en el Calcio. En esa misma temporada, llevaría a su equipo a la final de la Copa de la UEFA. La Fiorentina perdió esa final frente a la Vecchia Signora por un resultado de 3-1.
En esa misma temporada, el conjunto italiano estaba al borde de la quiebra y vendió a su estrella a la Juventus de Turín. Este fichaje fue ocultado por la directiva y la afición se echó a las calles para protestar y provocar altercados en la capital de la Toscana.
En sus 5 temporadas, disputó un total de 136 partidos anotando 55 goles:
Roberto Baggio se convirtió en el fichaje más caro de la historia por aquel entonces. Con este delantero, la Vecchia Signora encontró el perfil de jugador que necesitaban y a su goleador. Se adaptó a la perfección al estilo de juego bianconeri aunque, en su primera campaña finalizó en un discreto 7º puesto.
Con Giovanni Trapattoni, el conjunto bianconero volvería a ser quien fue dejando atrás la mala campaña anterior. Volverían a ocupar los puestos altos de la clasificación aunque, la Juventus no podría con el Milan pese a las genialidades de su estrella. En esa temporada el Milan ganaría el Scudetto.
En la temporada 1992/93, Baggio se consagró en lo más alto del fútbol internacional anotando 21 goles en el Calcio. Además de todo ello, aportó liderazgo al equipo para ganar la copa de la UEFA, en la que por aquel entonces era muy difícil de ganar.
Un año más tarde, recibiría el Balón de Oro que le acreditaba como el mejor jugador del mundo. Acompañado de ello, realizó otra campaña brillante en la edición de 1993/94. En la temporada 1994/95, firmaría una temporada irregular ya que quedó marcado por las lesiones. Lo positivo de aquella temporada fue romper la hegemonía del Milán y alzarse con el ansiado Scudetto.
Llegaría al banquillo bianconero el italiano Marcello Lippi. El propio entrenador comunica al delantero italiano que no está en sus planes y Baggio decide hacer las maletas y poner rumbo a la ciudad de Milán.
En sus 5 temporadas, disputó un total de 200 partidos anotando 115 goles:
Roberto Baggio llegaría al Milan procedente de la Juventus. Su fútbol callejero chocaría con el estilo de juego de Fabio Capello. Pese a ello, el jugador acabaría consiguiendo su objetivo, imponer su calidad.
En esa misma temporada, ganaría su segundo Scudetto consecutivo y el primero con la camiseta rossoneri. La siguiente temporada, el Milan se hundió debido a los malos resultados. Llegaría al banquillo Arrigo Sacchi.
Baggio mostraría numerosos detalles de calidad pero, la mala relación entre él y su entrenador le llevó al banquillo. El italiano tomó la decisión de hacer las maletas y abandonar el club.
En sus 2 temporadas, disputó un total de 67 partidos anotando 19 goles.
Roberto Baggio jugaría solo una temporada en la que renació de sus cenizas. Firmó su mejor registro goleador en una temporada. Su rendimiento hizo pedir a los italianos su convocatoría para el mundial de Francia 1998.
En su unica campaña, disputó un total de 30 partidos anotando 22 goles.
Tras el mundial de Francia 1998, Roberto Baggio volvería a la Serie A de la mano del Inter de Milán. Formó dupla con Ronaldo Nazario. Aquel equipo fue denominado como el Inter de las estrellas, aunque la campaña sería un desastre finalizando como 8º clasificado.
La próxima temporada, llegaría al banquillo Marcello Lippi. El técnico fue la principal causa de la salida del jugador italiano del conjunto bianconero. Parecía que las horas del jugador en el club estaban contadas.
Aunque firmaría grandes actuaciones, su técnico no contaba con él y lo llevó al banquillo. Es por esto que, el italiano saldría del Inter en dirección al Brescia.
En sus 2 temporadas, disputó un total de 59 partidos anotando 17 goles.
En el conjunto rondinelle, viviría sus últimas 4 temporadas de su carrera deportiva. Alcanzó la cifra de los 200 goles en la Serie A. Pese a sufrir alguna lesión de rodilla, dejaría un recuerdo imborrable. El club retiró el dorsal número 10 en honor a la leyenda.
Su último partido fue contra el Milan en San Siro. En el minuto 88, sería sustituido para que el jugador italiano se llevase la ovación del público y el reconocimiento de todos.
En sus 4 temporadas, disputó un total de 101 partidos anotando 46 goles.
A lo largo de su trayectoria disputaría un total de 643 partidos anotando 291 goles
Roberto Baggio sería internacional con la camiseta azzurra en 56 partidos en los que anotaría 27 goles. Es el 4º máximo goleador de Italia. Un dato desconocido por algunos aficionados es que, estamos ante el único jugador italiano que ha conseguido marcar en 3 mundiales.
Su primer mundial sería en Italia 1990. En ese mundial tendría el rol de suplente aunque, se ganó la titularidad. Anotaría 2 goles y caería eliminado en semifinales frente a la Argentina de Diego Armando Maradona.
Su segundo mundial sería en Estados Unidos 1994. Se convertiría en el líder de la selección. Anotaría 2 goles frente a Nigeria en octavos, 1 gol a España en cuartos y 2 goles en semifinales frente a Bulgaria. En la final, Italia y Brasil llegarían a la tanda de penaltis. Roberto Baggio falló el penalti decisivo y dando su cuarto mundial a Brasil. Este sería el momento más duro de la carrera del italiano.
Su tercer y último mundial sería en Francia 1998. Anotó 2 goles aunque, Italia caería eliminada en cuartos de final frente al anfitrión del torneo, Francia. Roberto Baggio no fue convocado para la Eurocopa 2000 y tampoco para el Mundial de 2002. Ambas decisiones fueron muy criticadas y todos los aficionados italianos mostraron su indignación.
Su último partido con la camiseta azzurra fue en un partido amistoso el 28 de abril de 2004. El partido se disputó en el estadio Luigi Ferraris de Génova, frente a la selección española.
Durante su trayectoría, consiguió: 2 Scudettos, 1 Coppa de Italia, 1 Copa de la UEFA, Mejor Jugador Joven de Europa en 1990, Máximo goleador de la recopa de Europa en 1991, Mejor futbolista europeo en 1993, 2º mejor fútbolista europeo en 1994, 1 Balón de Oro en 1993, 3º mejor futbolista del mundo en 1994.
Posiblemente, Roberto Baggio esté entre los 10 mejores jugadores italianos. Pero no contaba con el apoyo de sus entrenadores. En cambio, la gente y todos los seguidores le querían. Personalmente, pienso que si hubiera llegado a contar con el apoyo de sus entrenadores, hubiera conseguido algún trofeo individual más. En cambio, esto fue la cara negra de la carrera de esta gran leyenda. Sin embargo, para muchos es un referente y uno de sus ídolos.