Las salidas de Carvalho y Fekir, necesarias para poder fichar | OneFootball

El Real Betis necesita liquidez para ir al mercado con solvencia y encuentra en las salidas de William Carvalho y Nabil Fekir una vía para acometer el ansiado fichaje de Lo Celso

El Real Betis hizo una apuesta económica en su proyecto por mandar al equipo a los puestos altos de la tabla. Haro y Catalán le dieron la vuelta a un proyecto estancado y, siendo arriesgados, lograron tocar plata y clasificar a Europa en los últimos cuatro años. No obstante, esto ha llevado a realizar la ampliación de capital y ventas criticadas como las de Chadi Riad antes del inicio del próximo mercado de verano o la osadía con Luiz Felipe, que dejaron a Pellegrini con una defensa entre alfileres.

Los verdiblancos necesitan aligerar 4 millones del límite de coste de plantilla antes del 30 de junio para entrar en la regla 1/1, que con los movimientos realizados en la temporada pasada lo alejan del temeroso 1/4, que les obligaba a únicamente gastar un euro de cada cuatro que generaba. El Real Betis maneja dos salidas que le permitirían llegar a esta estabilidad económica, que no son otras que las salidas de William Carvalho y Nabil Fekir.

William Carvalho ha sufrido un bajón considerable de rendimiento respecto a las temporadas pasadas, en las que era un intocable en los planes del técnico Manuel Pellegrini. La irrupción de Marc Roca y Jhonny Cardoso han relegado al portugués a una segunda línea. Además, dos lesiones y su pobre nivel físico han lastrado un año en el que sólo ha disputado 11 partidos como titular. A pesar de que tiene contrato hasta 2026, a sus 32 años de edad el Betis sabe que no tiene poder de negociación por el jugador, su salida beneficiaría a aliviar 2.5 millones de euros limpios que recibe de manera anual, algo más de 5.000.000 brutos. El mercado árabe sería un destino que le permitiría firmar su último gran contrato.

Nabil Fekir, en cambio, es un jugador muy valioso tanto para el entrenador como para la directiva, tasando éstos al jugador en unos 20 millones de euros, según Mateo González en Al Final de la Palmera. El mediapunta francoargelino, aunque es una situación similar a la de Carvalho, ya que tiene contrato hasta 2026 y su rendimiento es bajo respecto al esperado, entendido por la durísima lesión del ligamento cruzado y otra de rodilla que lo alejaron desde febrero hasta octubre de 2023, sigue siendo un jugador con cartel. Pellegrini no quiere dejarlo salir a menos que llegue un refuerzo de su nivel y en la dirección deportiva no lo ven tan claro. Por tanto, buscan sacar dinero de una venta o renovarlo a la baja, pues es el jugador mejor pagado de la plantilla con un sueldo de 6 millones brutos. En Arabia Saudí le triplican la ficha pero, al Betis lo que le interesa es cuánto están dispuestos a pagar por él.