Mi Real Valladolid se esta muriendo | OneFootball

Artículo de opinión de Adrián Brecht

El equipo que me vio nacer, del que he sido socio desde que tengo uso de razón, del que he estado siempre a su lado, tanto en las desgracias como en los triunfos, el equipo por el que he llorado de alegría abrazado a mi padre como el que he llorado de tristeza por haber consumado otro descenso se encuentra en una situación insostenible y que nos hace que día a día nos pongamos en la peor situación posible.

El señor presidente, Ronaldo Nazario, y su sequito han logrado que un sentimiento como es ser del Real Valladolid sea cada día más duro, desilusión tras desilusión hace que subas al estadio con tu familia y lo último que quieras ver sea el propio partido porque sabes lo que va a pasar. Con una plantilla inoperante y unos despachos que hacen plantearte muchas cosas, ves como un club, que un día fue grande se va arrastrando por los campos de primera pidiendo clemencia y nadie hace nada para salvarlo.

Tras el último bochorno que se ha visto, el 7-1 frente al Athletic Club de Bilbao, las caras de los aficionados no eran de rabia o de enfado, sino que inundaba esa zona visitante una sensación de que ese sentimiento que compartíamos todos los que estábamos allí se iba muriendo poco a poco. No hay palabras para definir ese sentimiento de que una de las cosas que más quieres se está yendo poco a poco y mientras los aficionados de verdad sufrimos por esto, ves a otra gente que sigue sin inmutarse y se ríen de la propia afición.

Cuando Ronaldo aterrizó en Valladolid, se nos prometió que en un lapsus de 5 años el equipo estaría jugando competiciones europeas y la única vez que hemos salido del país para disputar un partido fue la temporada pasada cuando nos tocó visitar Andorra. Se nos prometió una ciudad deportiva que obviamente ha caído en el olvido y ahora mismo para Ronaldo el Real Valladolid es el juguete roto que se ha cansado ya de jugar con él y le ha abandonado en fondo de la caja. Pasan los años, los jugadores se van, la directiva cambia, pero los que seguimos al pie del cañón, recorriendo kilómetros por ver a nuestro equipo seguimos ahí y tenemos que aguantar que se rían en nuestra cara como el pasado domingo en Bilbao.

No es solo aguantar los desplantes y las faltas de respeto de nuestro presidente, sino que también tenemos que aguantar las faltas de respeto de los propios jugadores hacia su propia afición, como es el caso de Luis Pérez que se dedica más a estar pendiente de la afición y a hacer gestos obscenos a ella que al propio partido. Tienes que aguantar que encima que sigues al lado de tu equipo, se quejen y se molesten porque se les pita cuando lo hacen mal. Para muchos jugadores, venir a Valladolid es como pasar una estancia en un balneario y lo peor es que por parte de una porción de la afición esto es así.

Aun viendo como está el equipo y la situación BOCHORNOSA por la que se está atravesando, la afición sigue respondiendo y no abandona al club. La última respuesta hacía esto se vio en que en menos de 2 minutos se agotaron unas 650 entradas para acompañar al equipo y se nos agradeció con otro ridículo.

Imagen de la afición desplazada a San Mamés, Via X: Radio Marca Valladolid

Donde quedó ese Real Valladolid que era un histórico de Primera División, que tocó Europa de la mano de Cantatore, que tuvo jugadores de talla mundial como Peternac o Valderrama, que jugaba de tú a tú con los grandes, que se nos respetaba, ¿Dónde quedó ese equipo? Ahora mismo el Valladolid es un equipo sin alma, que está destinado al fracaso y que ya no se le toma enserio. Envidio a la gente que vio al Real Valladolid en Europa porque viendo el presente es una utopía que vuelva a pasar eso.

La situación que atraviesa el club y sus aficionados ha llegado a salir del país y en otros medios internacionales se está haciendo eco de la situación, pero lo peor es que los que de verdad tienen la batuta en esto y son los que lo pueden cambiar siguen sumergidos en una burbuja de la que no quieren salir y prefieren jugar al tenis en vez de preocuparse por el club.

Con esto, os habla un socio del Real Valladolid, que seguirá luciendo con orgullo el escudo de su equipo del que otros se encargan de pisotear y humillar y que seguirá diciendo orgulloso que es del Real Valladolid, por eso Señor Ronaldo, señora directiva os pido que os marchéis, que vendáis ya y que dejéis de machacar a un club que tiene detrás una masa social muy grande y que os estáis encargando de matarla, por favor iros.

El Real Valladolid no se merece esto.