Superlider
·31 de enero de 2025
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·31 de enero de 2025
Leandro Paredes está cada vez más cerca de volver a Boca Juniors. Las conversaciones entre el mediocampista y Juan Román Riquelme avanzan a buen ritmo, y en el club crece la ilusión de repatriar al campeón del mundo. Sin embargo, aún quedan algunos factores clave por definir, desde lo deportivo hasta lo personal.
Uno de los principales debates sobre su posible vuelta es cómo afectaría su lugar en la Selección Argentina. La Liga Profesional no tiene el mismo nivel competitivo que el fútbol europeo, y el propio Paredes sabe que un regreso a Boca podría interpretarse como un retroceso.
Aun así, Lionel Scaloni ha demostrado que no descarta a jugadores que actúan en el fútbol argentino, siempre que se mantengan en buen nivel y con ritmo de competencia. Casos como los de Germán Pezzella, Marcos Acuña, Gonzalo Montiel y Lucas Martínez Quarta, quienes volvieron a River y siguen siendo convocados, son un ejemplo claro de ello.
El propio Scaloni dejó en claro su postura recientemente en una entrevista con DSports:«Aparte de que lo aprecio como si fuera mi hermano, siempre hemos actuado igual con los chicos que han cambiado de club. Valoramos cómo juegan, no nos importa si están en una liga grande o pequeña.»
Boca tiene hasta el 12 de marzo para concretar la incorporación de Paredes, pero su llegada podría definirse antes. El club planea liberar un cupo con la salida de un jugador al exterior, lo que facilitaría el fichaje. En paralelo, el lunes 3 de febrero se cierra el mercado en Italia, lo que también puede ser un factor determinante.
Además, en Roma ya se percibe un clima de incertidumbre. Paredes mostró su descontento tras ser sustituido en la victoria de la Roma sobre el Eintracht Frankfurt en la UEFA Europa League, lo que ha alimentado aún más los rumores de su salida.
Más allá de lo deportivo, hay un tema personal que también juega un papel clave: la familia. Paredes y su esposa esperan a su tercer hijo, Lautaro, para el 29 de marzo, y la decisión de dónde nacerá puede influir en su futuro inmediato.
El volante campeón del mundo ya debe tener en mente los posibles escenarios, pero lo cierto es que en Boca todos sueñan con su regreso. Su llegada significaría un refuerzo de jerarquía para la Liga Profesional, la Copa Libertadores, la Copa Argentina y el Mundial de Clubes, torneos en los que el Xeneize quiere volver a ser protagonista.