Informa Fútbol
·25 de mayo de 2021
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·25 de mayo de 2021
La sala de rueda de prensa del Ramón Sánchez-Pizjuán se ha inundado de lágrimas y de recuerdos en la mañana de hoy, 25 de mayo. Tanto Vaclik como Franco Vázquez han acudido a las instalaciones sevillistas para despedirse de la entidad.
El primero en decir adiós fue el meta checo. El arquero ha disputado noventa y cuatro partidos oficiales con la vestimenta rojiblanca y se lleva bajo el brazo un título de la UEFA Europa League. Además, ha mantenido la portería a cero en treinta y cuatro ocasiones y ha dejado muchos recuerdos memorables en las mentes de los sevillistas.
José Castro fue el encargado de abrir el acto dedicándole algunas palabras al ex portero sevillista: “ Esta despedida es algo sentido y con cariño, fruto del buen vestuario que tenemos, de las buenas personas que tenemos en el Sevilla FC. Vaclik es un estupendo portero que siempre lo ha dado todo por nuestro club durante los tres años que ha estado con nosotros.”
Acto seguido, le dio las gracias por su compromiso a pesar de las dificultades que ha tenido que atravesar el checo tras su lesión contra el Eibar: “Su compromiso ha sido intachable”, destacó el presidente.
«Monchi» puso sobre la mesa el difícil papel que desempeña en el club y se lamentó por la decisión que tuvo que tomar como director deportivo: “La no continuidad de Tomas es una decisión que Monchi como persona no habría tomado nunca, pero como director deportivo desgraciadamente tuvo que tomarla”.
Su entrenador, Julen Lopetegui, también ha aparecido en la despedida y elogió al jugador: “Para mí ha sido un autentico placer ser tu entrenador. Eres un profesional extraordinario, tienes un mérito tremendo, eres un portero de máximo nivel”, añadía.
El cancerbero no pudo evitar emocionarse tras visualizar varios vídeos donde destacaban sus mejores momentos con la elástica rojiblanca. Entre lágrimas, el checo quiso mostrar su agradecimiento al club tras estos años: “Gracias en mayúsculas. Gracias a toda la afición sevillista, que desde el principio me ha hecho sentir como un hijo más de esta pasión. Gracias al presidente y a mis compañeros, que fue un placer muy grande el trabajar con vosotros”.
Tomas también se acordó de la afición que, debido a la pandemia, no ha podido despedirlo en el estadio: “Si me quedo con una espina clavada es por el hecho de no haberme podido despedir con nuestra afición. El aliento de nuestra hinchada es algo único que siempre voy a recordar cuando oiga Sevilla”, añadió.
Antes de marcharse, comentó que “Sevilla es una ciudad maravillosa, donde tanto yo como mi familia hemos sido muy felices. Sevilla y el Sevilla FC son parte de nuestra vida, porque nuestros corazones se quedan aquí. Fue un honor jugar en este equipo”.
Así, tras tres temporadas vigilando la portería sevillista, el Guardián de Nervión abandona las filas rojiblancas para poner rumbo a una nueva aventura.
Foto vía: Carlos Gamero