Offsider
·29 de diciembre de 2024
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·29 de diciembre de 2024
Y es que son muchas las razones por las que estar ilusionados. El 2024 se cierra con la consecución de un gran título después de 40 años de sequía. La Gabarra surcó la ría de Bilbao ante la mirada de más de un millón de personas que decidieron no perderse una cita histórica. Pero lejos de quedarse ahí, el Athletic ha comenzado el curso 24/25 de manera inmejorable y afronta la segunda parte de la temporada con todo aún por disputar. Un año cargado de ilusion.
Si había un equipo que merecía ganar la Copa era el Athletic
La Copa del Rey y el Athletic. El Athletic y la Copa del Rey. Una relación muy intensa, pero con muchos altibajos. Desde que se acomodara este trofeo en las vitrinas del club por primera vez en 1902, al conjunto rojiblanco siempre le ha gustado dar guerra en esta competición. Tanta que ya tiene 25 competiciones en su haber. Pero lo cierto es que desde aquella final en 1984, donde el Athletic derrotó al FC Barcelona por 1-0, se estaba generando un vacío cada vez más profundo.
Dejando de lado los logros de la Supercopa de España en el 2015 y 2021, los leones no sabían lo que era levantar una copa. Las nuevas generaciones estaban acostumbradas al fracaso. No se relacionaba al Athletic con la victoria. Y eso que su historia invita a pensar lo contrario.
En cualquier caso, el Athletic siempre ha puesto mucho interés en esta competición. Así como otros equipos ‘tiran’ la Copa a primeras de cambio, el equipo vizcaíno pone énfasis en cada eliminatoria y llega muy a menudo a las fases finales. De hecho, es el segundo equipo con más títulos, pero también uno de los que más finales ha perdido. 1986, 2009, 2012, 2015, 2020 y 2021 son las últimas finales que han terminado en derrota. A cada cuál más dolorosa que la anterior.
La final de este año fue agónica. Por la oportunidad que se presentaba, por la presión de ser el favorito… Y luego, por cómo transcurrió el partido. Pero finalmente se logró.
La cantera sigue dando sus frutos
El 2024 ha servido también para ratificar, una vez más, el valor de la cantera de Lezama. Cada poco tiempo, el Athletic es capaz de sacar jóvenes con calidad y capacidad para jugar en el primer equipo. A la ya consolidación de Aguirrezabala, Paredes, Prados o Nico Williams, se les suma la irrupción de Unai Gómez, Jaureguizar y Adama Boiro. Jugadores con hambre y ganas de triunfar en el club que les ha visto crecer. Chavales a los que se les ha dado la oportunidad y no la han desaprovechado. Más allá de los trofeos, el éxito del Athletic pasa por que la cantera siga dando sus frutos. La filosofía, desde luego, así lo requiere.
2025 viene fuerte
«Ganar un título hace que ya pienses en otro», comenta Paredes en una entrevista. Pensarlo es una cosa, demostrarlo en el campo es otra. Pero lo cierto es que al Athletic le ha sentado de lujo ganar la última Copa del Rey. Se ha asentado como un equipo muy bien amueblado y con esa confianza que quizás le venía faltando los años anteriores. A ello hay que sumarle el aliciente de la Europa League, competición que no disputaba desde 2018 y que la final de esta edición se disputará en San Mamés.
En liga los números son casi inmejorables. 36 puntos en 19 partidos, situándose así 4º a tan sólo 5 puntos del Atlético, primer clasificado. Además, lleva dos meses y medio sin conocer la derrota. En competición continental ocurre más de lo mismo. Colíder con 16 de 18 puntos. Ernesto Valverde ha confeccionado un equipo que si ya era bueno la temporada pasada, el tocar metal le ha hecho aún mejor. El Athletic parece no tener techo, o al menos no ha dado señales de lo contrario. Un 2025 con objetivos ambiciosos, un año cargado de ilusión.