Volvemos al infierno | OneFootball

Artículo de opinión de Adrián Brecht

Sí, otra vez, otra vez que nuestro Real Valladolid desciende de categoría, otra vez que sentimos esa misma sensación que durante estos años hemos sentido tanto. Aunque este descenso sea diferente, que desde octubre te hacías a la idea de que ibas a bajar, siempre duele y más por como han sido las formas en las que has bajado. Esta temporada, el Real Valladolid ha logrado que una ciudad, volcada con el club, que durante tantos años había dejado de lado a su equipo y que porfín tenía una buena masa social tenga desapego y sienta que se les está tomando el pelo.

Duele ver como esa ilusión cuando jugaba el Pucela y subías con tus familiares a ver los partidos se ha esfumado, duele ver como niños pequeños llevan la camiseta de otro equipo en vez de la del Real Valladolid, duele ver como socios, que llevan toda una vida al lado del club de sus amores, han dejado de ir porque no quiere que se rían en su cara. Sigues subiendo al estadio, pero no por ver al Valladolid sino porque si no subes sientes que traicionas al ESCUDO que tanto quieres, al blanquivioleta, a tu club.

En el himno del Real Valladolid hay una frase que dice así: «EL ESCUDO QUE LLEVAS EN TU PECHO LLEVALO CON ORGULLO Y CON HONOR Y DEFIÉNDELO CON HONRA Y CON RESPETO» , y efectivamente, los únicos que lo llevamos con orgullo y lo respetamos somos nosotros, la afición. Este año, el escudo ha sido pisoteado desde los despachos hasta el césped y lo que más duele de este descenso no es el mero hecho de hacerlo, sino que nos han llevado hacia este destino a la fuerza por una planificación nefasta que en su día hizo el club de cara a esta temporada y por unos jugadores que no están a la altura del escudo que portan.

En muchos partidos, después de ridículos, salía Anuar a pedir perdón a la afición y eso no nos vale, el primer perdón te lo aceptamos, pero cuando lleváis más perdones que puntos en toda la temporada ya no vale, son palabras vacías que a nosotros no nos sirven porque ves como llega otra nueva jornada y salen a andar por el campo, ves como jugadores se pelean en el banquillo y el club no hace nada, ves como se ríen en tu cara y tienes que tragar y es inadmisible.

Son 21 años de socio y esta sensación tras un descenso no la había vivido en ningún momento, el sentimiento que tengo es miedo, miedo a ver lo que viene porque parece que esto es solo el comienzo del fin.

No me podía ir sin hablar de los despachos, de Ronaldo, Paulo André, Catoira y todo el séquito del brasileño. Habéis logrado matar a un club casi centenario, que tenía una historia detrás y del que tanta gente siente sus colores. Sus decisiones, su abandono total, los fichajes «extraños» y así múltiples cosas más que hacen que estemos cansados de su inoperancia y de su tomadura de pelo hacia nosotros. Hace unos meses Catoira salía de las oficinas y decía a los medios de comunicación que había que ser feliz y me pregunto ¿ahora él está feliz?, con el Real Valladolid otra vez sumergido en el pozo.

VALLADOLID, SPAIN – FEBRUARY 16: Real Valladolid CF fans hold a protest banner against Real Valladolid CF president Ronaldo Nazário during the LaLiga match between Real Valladolid CF and Sevilla FC at Jose Zorrilla on February 16, 2025 in Valladolid, Spain. (Photo by Denis Doyle/Getty Images)

Volvemos a segunda división, volvemos a los infiernos y sabemos que ahora la estancia va a ser más larga. Tienes miedo a que tu equipo se asiente en esta categoría y no vuelva a ver la luz en muchos años, pero yo sé que este equipo volverá, volverá a lo que un día fue, volverá a ser grande, pero sin esta directiva, por eso señor Ronaldo vende ya, vete y no vuelvas nunca, deja de matar a un histórico, viniste aquí a sacar el mayor rédito posible y cuando viste que ya no podías estirar más el chicle le abandonaste como a un juguete viejo, todo el mundo se ha enterado de como has manejado al Real Valladolid y el peor parado eres tú.

Os habla un socio del Real Valladolid, que tras el pitido final y certificar matemáticamente el descenso echo lágrimas por sus ojos. Pero no quiero dejar de acordarme y dar las gracias a mi padre por hacerme del Real Valladolid, gracias papá por inculcarme que en esta vida no todo es color de rosas, que hay momentos duros y tienes que estar ahí, dando el callo y gracias por hacerme sentir orgulloso del sentimiento pucelano.

En los ascensos, en cada victoria, en las buenas es muy fácil ser del Real Valladolid, pero ahora es cuando de verdad se ve si eres de verdad de este club. Nunca te abandonaré, sé que volveremos, ¿cuándo?, el destino lo decidirá, pero volveremos más fuertes que nunca os lo prometo, por eso os pido que llevéis todos el escudo del Real Valladolid con honor y sintiéndoos orgullosos de llevarlo.

Por eso ahora más que nunca AÚPA PUCELA

VOLVEREMOS