FCBN
·17 janvier 2025
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El Real Madrid consumó el jueves ante el Celta de Vigo (5-2) uno de los robos más descarados que se recuerden en la Copa del Rey. Al conjunto gallego le negaron dos penaltis clarísimos, ambos pasados por alto por el VAR junto con una tarjeta roja perdonada a Endrick en la prórroga. Al respecto, Diego Simeone no dudó en eviar un 'palo' brutal a la 'Casa Blanca' por algo que, a estas alturas, normal en el fútbol español. Los robos arbitrales favorables al madridismo.
"El partido de ayer no lo vi, sinceramente. Me comentaron episodios que hubo dentro del partido, pero como los hay desde hace cien años, así que no sé qué les sorprende", explicó el 'Cholo' en la rueda de prensa previa al duelo ante el Leganés. En ese sentido, al ser consultado sobre si es o no posible competir contra el Madrid ante todo lo que ocurre con el arbitraje español, el argentino fue tajante. "Sí, porque todos compitieron desde hace cien años y siguen compitiendo, claro que se puede".
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A pesar de los múltiples errores de Munuera Montero (principal) y Hernández Hernández (encargado del VAR), la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) guardó absoluto silencio sobre las polémicas del partido, omitiendo la publicación de los audios del VAR (en el caso del penalti de Lunin a Swedberg) y las capturas del VAR semiautomático del fuera de juego previo a una clara mano penalti de Rüdiger en la primera parte de la prórroga.
¿Por qué no se publican los audios y las imágenes? La respuesta es clara. En el caso del penalti de Lunin, simplemente no hubo revisión del VAR, ya que implicaba anular el gol anotado por Kylian Mbappé en la jugada posterior. Y, sobre el offside previo a la mano penalti de Rüdiger, más de lo mismo. Las tomas televisivas evidenciaron que todos los jugadores del Celta involucrados en la acción estaban perfectamente habilitados.
El VAR también se negó a revisar un pisotón de Endrick y un puñetazo de Fede Valverde, ambos merecedores de expulsión durante la primera parte de la prórroga, cuando el marcador aún estaba igualado (2-2). Después, el brasileño (doblete) y el uruguayo marcarían los goles de la victoria para el Madrid, que también se salvó previamente de otra mano penalti de Jude Bellingham. Tal y como lo dijo Simeone, el del Celta fue el último de los incontables robos perpetrados desde hace un siglo por los 'merengues'. Al final, ya nada sorprende, pero es deber de los involucrados, cuando menos, alzar la voz ante el escándalo.