Campus oficial del FC Barcelona llega a Menorca en julio con la Barça Academy Camps | OneFootball

Este verano, el rugido azulgrana resonará entre los pinos menorquines. El Barça no solo viaja en aviones privados: también aterriza en campos humildes, donde sueñan las futuras estrellas del fútbol. Y esta vez, lo hace en Es Mercadal.

Del 14 al 18 de julio de 2024, el renovado campo Municipal Sant Martí de Es Mercadal será sede del Barça Academy Camps, el campus oficial del FC Barcelona. Esta será la primera edición en la isla menorquina, una oportunidad sin precedentes para que jóvenes nacidos entre 2010 y 2018 vivan una experiencia deportiva con el sello del club azulgrana.

La actividad se desarrollará durante las tardes, en colaboración con el CE Mercadal y el Ayuntamiento local, que ha respaldado la iniciativa desde el primer momento.

Entrenamiento azulgrana en clave menorquina

No se trata solo de chutar balones con la camiseta del Barça, sino de interiorizar su metodología: una mezcla de técnica, táctica y valores que ha dado forma a leyendas como Iniesta o Xavi.

Según la propia Barça Academy, el objetivo es “acercar el modelo formativo del club a lugares alejados de los grandes núcleos urbanos”.

Cada sesión estará dirigida por entrenadores oficiales del club, quienes transmitirán los valores que definen al FC Barcelona: esfuerzo, respeto, trabajo en equipo, ambición y humildad.

Un hito para el deporte formativo en Baleares

La llegada del campus a Menorca no es un hecho anecdótico. El Barcelona consolida así su presencia en las Illes Balears y fortalece su papel como referente global en la formación deportiva infantil.

"Es un hito histórico para Menorca y para el deporte base de la isla", subraya el club, que considera este paso como un avance pionero en la democratización del acceso al fútbol de élite.

Mientras algunos sueñan con ver jugar al Barça en el Camp Nou, otros —más afortunados— entrenarán como ellos en Es Mercadal. Porque a veces el fútbol no solo se juega en los grandes estadios, sino donde hay tierra, balón y niños dispuestos a correr tras una ilusión. Este verano, Menorca no será una isla: será una cantera.