Grada3
·14 janvier 2025
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·14 janvier 2025
Carlo Ancelotti atraviesa uno de sus peores momentos al frente del Real Madrid. Las carencias futbolísticas que el conjunto blanco ha ido arrastrando con el paso del tiempo, si bien no se han visto especialmente reflejadas en los resultados, si han evidenciado un problema en el Real Madrid que, ahora sí, parece ya una realidad.
La final de la Supercopa de España, en la que el conjunto blanco recibió un duro correctivo por parte del Barça, fue el claro ejemplo de que, hoy por hoy, el Real Madrid tiene muchas carencias como para competir con los grandes clubes europeos. Y en lo que respecta a su máximo rival, es la segunda vez que ocurre esta temporada.
La realidad es que, en términos globales, los números de Ancelotti contra el Barça no son malos durante sus dos etapas como técnico del Real Madrid, pero tampoco son unos números de escándalo. 9 victorias, 9 derrotas y ningún empate es el global de los enfrentamientos entre Ancelotti y la entidad azulgrana. Unos números que poco o nada tienen que ver con lo que se ha visto esta temporada.
Los dos encuentros entre el Real Madrid y el Barça han deparado sendas goleadas por 0-4 y 2-5 a favor de los de Flick, que en los dos encuentros ha sido muy superior en la pizarra a Ancelotti. El primero en el Bernabéu y el segundo en Yeda. Para más inri, si solo se tiene en cuenta la segunda parte del encuentro del Bernabéu y la primera del de Yeda, el global de goles es un escandaloso 1-8 a favor del Barça.
Pero, ¿qué pasa con el conjunto blanco este año? El propio Carletto no ha dudado en señalar los problemas defensivos como clave de ambas goleadas. Es cierto que de un partido a otro, intentó solventarlo con un cambio de esquema en la fase defensiva. Pasó del 4-4-2 del encuentro de Liga a un 4-2-3-1 en el encuentro de Yeda en las transiciones defensivas. Sin embargo, el resultado no fue muy diferente.
En la final de la Supercopa, Ancelotti trató de establecer un sistema de presión al hombre que funcionó en el tanto inicial de Mbappé, pero, a partir de ahí, no volvió a hacerlo. Cada vez que el Real Madrid salía a la presión, acababa con las líneas muy superadas. Esto no solo suponía un enorme espacio para el Barça en la zona del centro del campo, sino también una incapacidad para ganar las segundas jugadas, que siempre caían a favor de los de Flick.
Este vacío en el centro del campo brindó al Barça un enorme espacio para conectar entre la medular y la delantera, siendo esta la forma en la que llegaron los cinco goles blaugranas, con una defensa totalmente superada y unas ayudas por parte de los centrocampistas que siempre llegaban un segundo tarde a todos los envites.
No obstante, este no fue el único problema de Ancelotti. Y el gran problema se vio ejemplificado cuando el Madrid jugó casi 40 minutos contra diez y no disparó a portería más que en el libre directo de Rodrygo. Una serie de catastróficas desdichas que provocaron una nueva goleada por parte del Barça y, una vez más, ponen en duda el plan de Ancelotti.