Revista MadridistaReal
·27 April 2025
Rüdiger entona el ‘mea culpa’: así se ha disculpado en redes

Revista MadridistaReal
·27 April 2025
«No hay ninguna excusa para mi comportamiento de anoche. Lo siento mucho por ello. Jugamos un muy buen partido a partir de la segunda parte. Después de 111 minutos ya no era capaz de ayudar más a mi equipo y, antes del pitido final, cometí un error. Nuevamente, pido disculpas al árbitro y a todos los que decepcioné anoche». Mensaje que ha publicado Antonio Rüdiger en su cuenta de Instagram a fin de pedir disculpas después de su incidente en las postrimerías de la final de Copa del Rey (3-2).
El zaguero del Real Madrid, triturado por el desgaste físico durante el Clásico, se vio obligado a ver los últimos compases desde la caseta. No podía seguir. Imposible. No le daban las piernas. Y… sumido en un cabreo importante, Rüdiger perdió los papeles. De hecho, lanzó un objeto al propio De Burgos Bengoetxea mientras gran parte del banquillo madridista estallaba en cólera.
Tras ello (afortunadamente no golpeó al colegiado), el alemán siguió en sus trece, aumentaron los nervios y tuvo que ser retenido por varios compañeros para eludir males mayores. Así pues, el árbitro del encuentro le mostró la cartulina roja. Nadie discutió la evidencia, puesto que la expulsión era muy clarividente.
«En el minuto 120 el jugador (22) Rüdiger, Antonio fue expulsado por el siguiente motivo: Por lanzar un objeto desde el área técnica sin llegar a alcanzarme. Tras ser enseñada la tarjeta roja, tuvo que ser sujetado por varios miembros del cuerpo técnico, mostrando una actitud agresiva«, reza el acta de De Burgos.
Una vez consumada la escaramuza, Rüdiger se enfrenta a una sanción que va desde los 4 hasta los 12 partidos. Por lo pronto, al tratarse de una pena grave, el central del Madrid se perdería encuentros de Liga, la única competición a la que pueden optar los de Carlo Ancelotti antes de la celebración del Mundial de Clubes en Estados Unidos. La lista de expulsados, anoche, no culminó ahí. Y es que, Lucas Vázquez y Bellingham, fruto de desesperación por la derrota, también recibieron la cartulina roja. Parte de guerra.
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