Superlider
·04 de fevereiro de 2025
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El caso Luis Rubiales sigue sacudiendo al fútbol español, y ahora un nuevo testimonio ha desatado la polémica. Pablo García Cuervo, exjefe de comunicación de la RFEF, declaró que Jenni Hermoso supuestamente dio su aprobación al comunicado que minimizaba el beso que le dio el expresidente de la Federación tras la final del Mundial Femenil.
En una declaración tensa ante la fiscal Marta Durántez, García Cuervo reveló que decidió no pedirle a Hermoso un video confirmando su postura porque «no se fiaba» de que la jugadora mantuviera su versión. «Es bastante influenciable y manipulable», afirmó, lo que provocó una reprimenda inmediata del juez, quien le exigió no descalificar a la futbolista.
Según el excomunicador, el comunicado se elaboró basándose en declaraciones previas de Hermoso a la prensa y se le leyó antes de su difusión. “Le pregunté si estaba de acuerdo y me dijo ‘vale, ok’. Si hubiera dicho que no, no lo habríamos publicado”, aseguró. Sin embargo, la versión de la delantera es diferente, pues en su testimonio indicó que solo expresó un desinteresado “haced lo que queráis”.
La situación ha escalado aún más con la revelación de que Rubiales supervisó el comunicado antes de su publicación, lo que aviva las sospechas de que la RFEF intentó encubrir el escándalo desde el primer momento.
Mientras tanto, Hermoso continúa firme en su versión: el beso fue un acto no consentido que “manchó uno de los días más felices” de su carrera. Con Rubiales a la espera de testificar, el caso sigue generando un terremoto en el fútbol español, con más detalles que podrían salir a la luz en los próximos días.
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