Las claves del buen momento del FC Barcelona | OneFootball

El Barcelona se ha convertido en uno de los equipos de moda del continente europeo. Su actual entrenador, Hansi Flick, ha recuperado el espíritu competitivo de un club acostumbrado a luchar por todos los títulos. En este mismo momento, se encuentra luchando por el campeonato de Liga, por llegar a la final de la Copa del Rey y ya está en cuartos de final de la Champions League. Falta rematar el trabajo para poder llenar las vitrinas del futuro Camp Nou de nuevos títulos. En este artículo, vamos a repasar las claves que explican el gran rendimiento del equipo catalán.

La química de la delantera El Barça siempre ha conseguido configurar delanteras letales. El que es seguramente el mejor ataque de la historia del fútbol –Messi, Suárez y Neymar- nos regalaba exhibiciones cada fin de semana. Esta temporada los tres jugadores referencia del ataque blaugrana son Lamine Yamal, Raphinha y Lewandowski. Como si de una de las muchas combinaciones de poker existentes se tratase, los tres jugadores forman un trío perfecto capaz de imponerse a cualquier otra mano. Y del mismo modo que los juegos de casino actuales se han digitalizado en el mundo moderno, los jugadores han sabido interpretar correctamente la fortaleza física del nuevo fútbol. Estamos ante un triplete ofensivo que seguro que se recordará por muchos años.

Mezcla equitativa entre juventud y talento Como se suele afirmar en tantos otros registros, en el punto medio se encuentra la virtud. Este nuevo Barcelona se ha reconstruido configurando una columna vertebral basada en el talento joven. Nombres como Gavi, Cubarsí, Lamine o Balde llevan el ADN blaugrana en su sangre. Han estado formados en La Masia, la escuela futbolística del club que no cesa en su empeño de nutrir al primer equipo de nuevos referentes. Ya lo hicieron previamente Xavi, Puyol, Messi o Iniesta, creando el mejor Barça de la historia.

Cuando los jugadores jóvenes dan el salto al fútbol de élite, se entiende que es necesario un período de adaptación para poder entender sus mecanismos competitivos. Sorprendentemente, este nuevo Barcelona está rompiendo todos los esquemas, ya que muchos de los jugadores –con una mayoría de edad recién cumplida- parecen veteranos. Y a este hecho se le suma el amor incondicional que sienten por una entidad que les ha dado todo. Una fórmula que otros equipos intentan emular sin éxito.

La plantilla se configura entre jugadores jóvenes y otros deportistas experimentados, como son Lewandowski o Szczesny, que regresó del retiro para defender la portería barcelonesa.

Capacidad táctica del entrenador Evidentemente, no pueden entenderse las virtudes del FC Barcelona sin los ajustes tácticos del entrenador. Hansi Flick se ha convertido por méritos propios en una de las figuras más queridas por la parroquia culé. Manteniendo un perfil bajo y respetuoso, ha aplicado una serie de mejoras en la construcción del equipo que están dando un resultado más que notable.

Hay dos decisiones que destacan por encima del resto. La primera es la de ubicar a Pedri en una zona más relajada de la creación. En las temporadas anteriores, se situaba en la zona frontal del área rival, un ecosistema en el que todo el mundo pensaba que podría ofrecer su mejor nivel. Flick, en cambio, lo ha ubicado en paralelo a la línea central del campo. De esta manera, baja a recibir en una zona más retrasada para poder construir el juego a través de su figura. Este mero movimiento ha cambiado totalmente la cara de Barça, y también la del propio jugador. El año pasado había muchas críticas relacionadas con su desempeño sobre el terreno de juego, mientras que hoy en día es uno de los aspirantes al Balón de oro.

El segundo cambio relevante está relacionado con la zona defensiva. Los centrales blaugranas han aprendido a marcar la línea del fuera de juego con una precisión que no parece humana. De esta manera, los atacantes rivales encuentran muchas dificultades para poder desmarcarse, un movimiento táctico que realizan constantemente sin éxito. Seguramente esta sea una de las temporadas en las que más goles en contra le han anulado al Barça, otro síntoma del buen hacer del técnico alemán que ha llevado al club al top 8 europeo.