La Galerna
·27 de dezembro de 2024
La Galerna
·27 de dezembro de 2024
Buenos días, amigos. El nuevo presidente de la Real Federación Española de Fútbol tiene, como tal, problemas con la justicia. No sería un presidente de la Real Federación Española de Fútbol como Dios manda si no los tuviera. Está condenado por prevaricación. A pesar de que, por tanto, tiene todos los tics en las casillas adecuadas para presidir con todos los honores tan sacrosanta institución, de no prosperar su apelación ante el Tribunal Suoremo tendrá que dimitir. ¿En qué quedamos? ¿Hay que ser un delincuente para presidir la RFEF, o es al contrario? No hacen más que confundirnos.
El caso es que el sujeto en cuestión, que responde al nombre de Rafael Louzán, ha hecho dos cosas nada más asumir el cargo. La primera ha sido declararse madridista. Tierra, tráganos. Hay que huir como de la peste de los presidentes de la RFEF, de la Liga o de la comunidad de vecinos que se proclaman madridistas, desde Tebas a Villar, pasando por Rubiales. Lo tenemos muy observado: el madridismo es una cosa tan amplia que cabe dentro hasta el antimadridismo. Por lo que sea, todos los prebostes del fútbol patrio que se han declarado madridistas han resultado serlo (no lo discutimos), pero adscritos a esta última facción.
La segunda cosa que ha hecho Louzán es nombrar vicepresidente a Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Profesional como lucrativo hobby y Enemigo Público Número Uno del Real Madrid como profesión a tiempo completo. Y es aquí donde, tras la declaración de madridismo de Louzán, viene el segundo escalofrío. Explicamos a continuación el tercero, que se deriva de lo ya dicho.
Ya ha sido subrayada la condición de interino en el puesto de Louzán. Un dictamen del Supremo que confirme la sentencia que sobre él pesa debería acarrear la imposibilidad de ejercer cargos como el que ahora mismo ostenta. En consecuencia, si esto se confirma allá por febrero, debería dimitir, lo que desembocaría en el vicepresidente tomando las riendas de la institución. ¿Y quién (tatachán) es el vicepresidente?
Sí, amigos. El Enemigo Público Número Uno del Real Madrid, que ya manda lo suyo al frente de la LFP, podría llegar a detentar el poder omnímodo de unir a ese cargo el de Presidente de la RFEF, a menos que haya (y nadie parece saber de su existencia) alguna disposición legal que lo impida.
A todo esto, incluso en la eventualidad de que esté suceso escalofriante no llegue nunca a tener lugar, la ganancia de poder de Tebas al ejercer ya como segundo de a bordo en la RFEF pone los pelos de punta y mete miedo al mismísimo pavor. Por otro lado, Louzán ha llevado a cabo otros movimientos que parecen contradecir a este pero pueden ser meramente cosméticos, como el cese de Medina Cantalejo como miembro de la junta de la Federación. Solo nos creeremos que existe un deseo real de regeneración cuando Medina Cantalejos sea cesado como jefe de los árbitros, y con él su infumable equipo de herederos de Negreira, desde Clos Gómez a Undiano Mallenco y todos los trencillas en activo que ya lo estaban cuando ejercía Negreira.
Por lo demás, las portadas del día tienen como atractivo máximo a Pep Guardiola, que está pasando las de Caín en el City, con una sola victoria en los últimos trece partidos. Se rumorea que el bueno de Pep lleva ya grabado en la calva un mapa en relieve de la comarca del Bages, practicado con sus propias uñas, a consecuencia del stress.
¿Será la baja de Rodri? Imposible. Un club ganador (y con todo el dinero del mundo) como el City nunca habría caído en la negligencia de no tener al segundo mejor mediocentro del mundo en la plantilla para cubrir la eventualidad de una posible lesión del mejor mediocentro del mundo.
¿Serán los cambios en los controles antidoping de la Premier los que de pronto han provocado un hundimiento físico como el que de pronto manifiestan los hombres del de Sampedor? No, no, no y mil veces no.
¿Qué será entonces? No tenemos la menor idea. Bastante tenemos con las innumerables preocupaciones, síntoma todas ellas de una crisis profundísima, de nuestro equipo, ese que ha logrado 5 de los 6 títulos a los que optaba en el año que ya finaliza pese a estar pésimamente gestionado.
Pasad un buen día. Os dejamos con el resto de portadas.