El Barça gana al Mónaco y habrá quinto partido | OneFootball

Un Brizuela incontestable en el último cuarto y 22 puntos de Jabari Parker logran la victoria para los locales

El Barça gana 79-72 al Mónaco en el cuarto partido de la primera ronda de los playoffs de Euroliga. El Palau blaugrana fue clave a la hora de apretar, beneficiándose de ello Jabari Parker, 22 puntos, y Dario Brizuela, 17 puntos. Por parte de Mónaco, los 17 de Mike James con un porcentaje de tres del 20% no fueron suficientes para cerrar la serie.

El conjunto entrenado por Joan Peñarroya arrancaba el partido con Satoransky, Punter, Anderson, Parker y Fall. Los de Spanoulis salían con Mike James, Okobo, Blossomgame, Diallo y Theis. La elección de estos quintetos, junto a la presión ejercida por un Palau al rojo vivo, propiciarían un inicio eléctrico de los locales, poniéndose 15 a 3 tras 5 minutos de partido.

Willy Hernangómez y Mam Jaiteh. (@FCBbasket)

El personaje principal en este tramo de encuentro sería Jabari Parker, quien anotaría 11 puntos con un 3 de 3 en triples. Su gran ayudante no iba a ser otro que Willy Hernangómez, que estaba logrando anular tanto a Daniel Theis como a Mam Jaiteh.

El torrente ofensivo sería capaz de detenerlo Mónaco, anotando tan solo 8 puntos más en el resto del cuarto, aumentando a su vez su producción ofensiva, quedándose 23-14 abajo al final del cuarto. Jordan Loyd era quien cargaba con la responsabilidad, estando mal otros más habituales en este tipo de tareas como James o Diallo.

Darle la vuelta

El segundo cuarto iría de cara para los del principado, consiguiendo un parcial de 12 a 3, poniéndose 27-26 abajo. Quien iba a aparecer ahora era el exNBA Daniel Theis. El alemán, ayudado por Mike James, metería un triple muy punteado y se haría con el control de la pintura ante la inefectividad de Youssoupha Fall. Esta dinámica continuaría hasta el punto que Mónaco sería capaz de darle la vuelta y ponerse 27-30 arriba.

Dario Brizuela, ante el mal partido de Kevin Punter, cogería el peso del partido y anotaría dos triples consecutivos para devolver la ventaja al Barça, quedándose 33-32 por encima en el luminoso. El cuarto acabaría con cuatro tiros libres a favor de Mónaco, por una falta en el triple sobre Strazel y una técnica señalada sobre Satoransky. El propio Strazel los convertiría para irse Mónaco 35-38 arriba a los vestuarios.

Kevin Punter defendido por Daniel Theis y Alpha Diallo. (@FCBbasket)

Intensidad

Los locales saldrían dormidos en la segunda mitad, alejándose hasta los 8 puntos en el casillero (38-46). Pese a ello, los catalanes reaccionarían, recortando diferencias mediante Anderson y Punter. El partido se igualaría, quedándose ambos equipos a unas diferencias cercanas a los 5 puntos constantemente.

El final del tercer cuarto sería de una intensidad altísima, teniendo constancia ambos equipos de lo que se estaban jugando. De esa forma, el Barça, con un Punter muy activo en facetas no comunes en él, remontaría hasta poner la igualada en el marcador a 58, faltando tan solo 20 segundos de cuarto. Los equipos afrontarían el último cuarto con ese mismo marcador.

Minutos de infarto

El que iba a empezar enchufado el último cuarto iba a ser Dario Brizuela. La «mamba vasca» iba a ser clave tanto en defensa como en ataque para los culés, siendo protagonista en casi todas las acciones de impacto. Esto iba a activar tanto a jugadores como a afición, muriendo ambos equipos por cada balón suelto. La aportación de otros jugadores iba a colocar a los locales 73-68 arriba.

Dario Brizuela en sus minutos estelares. (@FCBbasket)

Los últimos dos minutos serían de infarto. El Mónaco, por debajo, no se descolgaba en ningún momento, haciendo que el corazón de los 7018 espectadores del Palau no pudiera descansar. Pese a la tensión palpable, el Barça, gracias a una gran defensa, se plantaba a 15 segundos del final con 5 puntos de ventaja (77-72).

El partido finalizaría 79 a 72 a favor del Barça, destacando los 17 puntos anotados por Brizuela con su racha endemoniada en el último cuarto y los 22 de Jabari Parker. Ahora, la serie vuelve al principado de Mónaco para recibir visto y sentencia en un quinto partido cuya tensión se podrá cortar con un cuchillo.